Nikolas Cruz, el sospechoso de la matanza de 17 personas en 2018 en el instituto Marjory Stoneman Douglas de Parkland (Florida), irá a juicio, pero no por los asesinatos.
La selección del jurado comienza el lunes por los cargos de que Cruz atacó al sargento Raymond Beltrán, un guardia de la cárcel del condado de Broward. Se enfrenta a una posible condena de 15 años si es declarado culpable de intento de agresión criminal a un agente de la ley y de tres cargos menores.
Cruz, de 23 años, será condenado a muerte o a cadena perpetua sin libertad condicional si posteriormente es declarado culpable de asesinato en primer grado.
Si Cruz es declarado culpable de atacar a Beltrán, los fiscales pueden argumentar que se trata de un factor agravante cuando soliciten su ejecución durante la fase de la pena de su juicio por asesinato, que se ha retrasado por la pandemia y las discusiones sobre los testigos y las pruebas.