Gerrit Cole es conocido por sus compañeros de equipo como un estudioso del juego. En un partido a vida o muerte contra Boston, los Yankees esperan que su as de 324 millones de dólares los haya estudiado cuidadosamente.

El 19 de septiembre, mientras los Yankees se esforzaban por conseguir un puesto de comodín en la postemporada, perdieron por 11-1 ante Cleveland en un partido en el que su as, Gerrit Cole, permitió siete carreras. Caminando hacia el clubhouse después del último out, el relevista Michael King vio a Cole sentado en el casillero del catcher Kyle Higashioka y haciendo algo que encaja con su naturaleza meticulosa.

“Estaba repasando cada uno de los lanzamientos que acababa de hacer”, dijo King sobre Cole, que hizo 104 de ellos ese día. “Él estaba como, ‘¿Fue este el lanzamiento equivocado?'”.

El martes por la noche, los Yankees pondrán sus esperanzas de postemporada en Cole, el lanzador estrella al que firmaron un contrato de nueve años y 324 millones de dólares antes de la temporada 2020 para momentos como este. No es sólo un juego de comodín de la Liga Americana en el que hay que ganar o irse a casa, y no es sólo contra sus rivales, los Medias Rojas de Boston. También es en Fenway Park.

Los Yankees tienen muchas razones para estar seguros: Cole, cuatro veces All-Star, ha producido un promedio de 3.23 carreras ganadas, un récord de 16-8 y 243 ponches en 181⅓ entradas esta temporada. Y en 13 salidas de postemporada, tiene un promedio de carreras ganadas de 2.68, incluyendo dos victorias para los Yankees en los playoffs del año pasado.