Durante un periodo de 15 meses de la pandemia, más de 120,000 niños en Estados Unidos han perdido a uno de sus padres o cuidadores a causa del Covid-19, una pérdida que ha afectado más gravemente a las minorías raciales, según un estudio de modelización publicado en la revista médica Pediatrics.
El estudio estimó que por cada cuatro muertes por Covid-19 entre el 1 de abril de 2020 y el 30 de junio de 2021, un niño perdió a su padre o cuidador. El hallazgo sugiere que la pandemia en curso, que se ha cobrado más de 700,000 vidas estadounidenses hasta el momento, podría dejar a decenas de miles de niños lidiando con el trauma durante generaciones.