Un dominante esfuerzo general aseguró la victoria en el sexto partido, permitiendo a un equipo de 88 victorias vencer a los Astros de Houston y triunfar en una etapa en la que los equipos más célebres de los Braves del pasado solían tener problemas.
Así pues, este es el equipo de los Braves que encontró la forma de igualar a los grandes equipos de Atlanta de la década de 1990. Este equipo, sin un trío de ases del Salón de la Fama, sin un entrenador legendario y sin un bagaje de experiencia en las Series Mundiales sobre el que apoyarse, de alguna manera encontró la manera.
En una fría noche de martes con el techo abierto en el Minute Maid Park, Atlanta venció a los Astros de Houston por 7-0 en el sexto partido para ganar la Serie Mundial en su primera aparición en el Clásico de Otoño desde 1999, y conseguir el primer título de Atlanta en 26 años.