Los arqueólogos han descubierto recientemente un anillo de oro y amatista púrpura en el emplazamiento de una antigua bodega en Yavne, Israel.
Los habitantes de esta región creían que la gema tenía varias “virtudes”, entre ellas la capacidad de disminuir los efectos del consumo de alcohol.
Elie Haddad, codirector de la excavación, dijo que la joya de la época bizantina podría haber pertenecido al propietario de la fábrica de vino o a un visitante que esperaba evitar la resaca.