Kentucky ha sobrepasado las 10,000 muertes por COVID-19 desde marzo de 2020, un resultado duro ya que el virus continúa su propagación por todo el estado, golpeando con más fuerza a los que no están vacunados.
El gobernador Andy Beshear anunció que ya han muerto 10,019 personas por COVID-19, una cifra que calificó de “desgarradora”.
La mayoría de esas muertes recientes podrían haberse evitado si se hubiera vacunado a más personas, dijeron Beshear y su comisionado de salud pública, el Dr. Steven Stack.