Los medicamentos antivirales han contribuido a inspirar la esperanza entre los altos funcionarios de la administración de que Estados Unidos podrá frenar el devastador número de víctimas de la variante Delta.
El gobierno de Biden tiene previsto pagar más de 5,000 millones de dólares por una reserva de la nueva píldora Covid-19 de Pfizer, suficiente para unos 10 millones de tratamientos que se suministrarán en los próximos 10 meses, según personas familiarizadas con el acuerdo.
Los altos funcionarios de salud federales cuentan con que el medicamento sea un arma poderosa contra el Covid. Cuando se administró con prontitud a grupos de prueba de personas de alto riesgo no vacunadas que desarrollaron síntomas de la enfermedad, el fármaco redujo drásticamente el riesgo de hospitalización y muerte.
Pfizer solicitó la autorización federal del fármaco con carácter de urgencia. Una píldora similar desarrollada por Merck y Ridgeback Biotherapeutics podría ser autorizada tan pronto como a principios de diciembre, lo que significa que las farmacias podrían tener suministros limitados en semanas. El tratamiento de Pfizer se toma en un régimen de 30 pastillas durante cinco días; el de Merck requiere 40 pastillas durante cinco días.
