¿Es mejor para mi salud general dormir ocho horas por noche durante la semana pero no tener tiempo para hacer ejercicio, o dormir de seis horas y media a siete horas por noche y hacer un entrenamiento por la mañana?

“Es una elección terrible”, afirma el Dr. Charles Czeisler, experto en sueño del Hospital Brigham and Women’s y de la Facultad de Medicina de Harvard, en Boston. Tanto el sueño como el ejercicio son componentes clave de un estilo de vida saludable y no deben enfrentarse entre sí, dijo el Dr. Czeisler.

El sueño es importante para los entrenamientos, señaló, ya que reduce el riesgo de lesiones y permite que los músculos se recuperen del ejercicio. La falta de sueño debilita el sistema inmunitario, lo que aumenta las probabilidades de enfermar, lo que significa perder los entrenamientos. Sacrificar el sueño también se ha relacionado con el aumento de peso, las enfermedades cardiovasculares y la diabetes, entre otros problemas de salud. Por supuesto, el ejercicio regular también aporta muchos beneficios, como un sueño más profundo.

Pero la gente sigue necesitando unas ocho horas de sueño por noche. Por tanto, si te levantas después de seis horas y media para hacer ejercicio, “básicamente estás haciendo ejercicio durante tu noche biológica”, dijo.

Una investigación de la Universidad de Northwestern sugiere que las células musculares también tienen ritmos circadianos, y que funcionan y se recuperan mucho mejor durante el día biológico que durante la noche biológica. “Por lo tanto, levantarse durante la noche biológica para hacer ejercicio es contraproducente”, dijo el Dr. Czeisler.