Es difícil aceptar la derrota. Es especialmente difícil después del tipo de carrera que tuvo Leylah Fernández en el US Open, venciendo a tres jugadoras clasificadas entre los cinco primeros en su camino a su primera final de Grand Slam, donde sucumbiría ante otra adolescente en su primera final, Emma Raducanu. Pero si hay algo que Fernández ha aprendido de esa derrota es que debe mejorar.

Eso, y que tiene que tomar lo bueno con lo malo y tratar de aprender de ambos. “Tengo que mejorar todo mi juego”, le dijo Fernández a ESPN . “Mejorar mi derecha, mi servicio, mi volea, todo en un dos o tres por ciento para estar entre las diez (primeras) del ranking (mundial), entre las cinco (primeras), y un día ser la número 1 y ganar un Grand Slam. ”

Los objetivos claros también ayudan. Y Fernández parece tener la mirada puesta en la siguiente etapa de su carrera.

Para los atletas, puede ser difícil darse crédito a sí mismos cuando no se ha alcanzado el objetivo final, pero a pesar de que Fernández espera un 2022 aún mejor, es importante tener en cuenta lo bueno que fue el 2021 para ella. Comenzó el año en el puesto 88 y lo terminó en el puesto 24. Ella ganó su primer torneo. Llegó a esa final del US Open. Y aprendió que puede jugar con las mejores jugadoras de la WTA, y no solo ser competitiva, sino también ganar.

El resto no es exactamente fácil, pero es factible. Es solo una cuestión de trabajo duro y determinación, y Leylah Fernández parece tener ambas cosas en abundancia.