Las universidades cancelaron eventos, la Liga Nacional de Fútbol Americano informó de un número récord de casos y se formaron largas colas en las clínicas de análisis de la ciudad de Nueva York, ya que el fuerte aumento de los casos de COVID-19 y la preocupación por la variante Ómicron volvieron a perturbar la vida estadounidense.
Los esfuerzos diplomáticos de EE.UU. fueron víctimas de la nueva oleada de infecciones, y el Secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, interrumpió un breve viaje al sudeste asiático tras enterarse de un caso de COVID-19 en el cuerpo de prensa que le acompañaba.
En el último mes, los nuevos casos han aumentado casi un 50% hasta alcanzar una media durante siete días de 122,000 nuevas infecciones diarias. A estas alturas durante 2020, Estados Unidos registraba una media de 219,000 nuevas infecciones diarias.