En un principio, la empresa iba a pagar a sus empleadas 10 millones de dólares, hasta que California luchó con éxito para conseguir más dinero.

Riot Games, el fabricante de videojuegos detrás de títulos populares como League of Legends y Valorant, dijo que había acordado pagar 100 millones de dólares para resolver una demanda por discriminación de género con más de 2,000 empleadas.

La demanda colectiva, que fue presentada en 2018, estaba originalmente en camino de un acuerdo de 10 millones de dólares, pero a principios de 2020 dos agencias de empleo de California tomaron la inusual medida de intervenir para bloquear el acuerdo, argumentando que las mujeres podrían tener derecho a más de 400 millones de dólares. Al margen de la demanda, el Estado había estado investigando a la empresa tras las denuncias de acoso sexual, discriminación, desigualdad salarial y represalias contra las mujeres.