Fuiste la amante durante mucho tiempo, hasta que te saliste con la tuya y él dejó a su esposa o pareja estable para estar contigo. Sientes que has triunfado, pero no es tan cierto.
La “otra” se aburre y se cansa de tener el tiempo contado con su amante y aunque recibe regalos y detalles importantes, llega un momento en que ella desea dejar de ser la amante para convertirse en la pareja oficial.
Te quedaste con ese hombre que tanto deseas, te sientes victoriosa y feliz de dejar de ser “la otra” y te convertiste en la oficial, sin tener en cuenta todo el dolor que pudieron ocasionar a su antigua pareja y a los hijos si los hubiera.
Cuando esto ocurre, el puesto de la “otra” quedar vacío y es probable que él quiera llenarlo y vuelva a ser infiel, pero esta vez te lo hará a ti como se lo hizo a su anterior pareja.
Ahora puedes sentirte feliz y triunfante, pero debes empezar a pensar que él puede hacerte lo mismo que le hizo a su ex. Posiblemente, él cambie de actitud al comienzo de la relación, pero seguirá con sus “mañas” y a medida que va llegando la rutina a la relación, él va a sentir la necesidad de buscar la adrenalina que le ofrece la infidelidad y acabe involucrado en una relación paralela.
Puedes ser afortunada y lograr que él cambie de verdad, pero lo más probable es que te pague con la misma moneda.