Un hombre basa su concepto de figura masculina y la paternidad dependiendo de la relación que haya tenido con su padre, especialmente en la niñez y adolescencia.
Cuando la relación padre – hijo no ha sido la adecuada, ya que tuvo un padre ausente, maltratador, abusivo o negativo, se complica la posibilidad de tener una buena conexión con sus hijos cuando sea su momento de convertirse en padre.
Además, es más fácil que ese hombre tienda a repetir el modelo paternal que tuvo por lo que debe hacer un esfuerzo inmenso para no repetir su experiencia con los hijos.
Tampoco es conveniente que se vaya al otro extremo y se convierta en un padre demasiado complaciente y sobreprotector.
Para hacerlo de la forma correcta, aquí damos algunos conceptos:
• El padre y la madre se encargan de enseñar valores y respeto a la autoridad a sus hijos.
• Un padre debe ser accesible a sus hijos, pero eso no significa que se convierta en el amigo más popular.
• Cuando un padre se convierte en un “super amigo” de sus hijos, pierde un poco de autoridad y respeto.
• Sirve como guía y modelo de lo correcto e incorrecto.
• Cuando un hombre ha tenido una relación negativa con su padre y todavía no lo ha sanado, debe esforzarse por perdonar para tener una buena salud mental. Si no es posible hacerlo solo, debe buscar asesoría profesional.