Los profesores y alumnos de Chicago estaban preparados para volver a las aulas el miércoles, después de que los dirigentes de la ciudad llegaran a un acuerdo con el sindicato de profesores de Chicago sobre los protocolos de seguridad del COVID-19, en medio de una oleada de casos en todo el país alimentada por la variante omicrónica.

Las clases se detuvieron la semana pasada después de que los miembros del sindicato votaran a favor de cambiar temporalmente a la enseñanza a distancia, y el distrito reaccionó cancelando las clases por completo.

La alcaldesa de Chicago, Lori Lightfoot, dijo que la ciudad y el sindicato llegaron a un acuerdo sobre una métrica que cambiaría automáticamente una escuela a la enseñanza a distancia si un cierto número de estudiantes y personal da positivo.

Se espera que los 25,000 miembros del sindicato voten el acuerdo esta semana, informó el Chicago Tribune.