Una importante escasez de chips para ordenadores ha dejado a algunos fabricantes con sólo cinco días de inventario debido a los problemas de la cadena de suministro.
Según un nuevo informe del Departamento de Comercio, el suministro medio de chips en manos de los fabricantes ha caído de 40 días en 2019 a menos de cinco días el año pasado.
El suministro limitado significa que las interrupciones de la producción en el extranjero -como las derivadas del clima o los nuevos brotes de Covid-19- podrían volver a provocar el cierre de fábricas y el despido de trabajadores en Estados Unidos.
Esto sigue perturbando la producción en el extranjero, mientras que la pandemia y el clima extremo provocan aún más retrasos.
La escasez se ha dejado sentir en todo el mundo, provocando subidas de precios en todo tipo de productos, desde coches hasta teléfonos móviles y lavadoras.