El gobernador de Nueva Jersey, el demócrata Philip Murphy, que ha impuesto algunos de los mandatos más estrictos del país en relación con la pandemia, dijo que el estado ya no exigirá que los estudiantes y los empleados de las escuelas lleven máscaras. La nueva política es un cambio deliberado hacia el tratamiento del coronavirus como parte de la vida cotidiana, y entrará en vigor la segunda semana de marzo.

El debate sobre el uso de mascarillas en las escuelas ha sido uno de los temas más controvertidos de la pandemia, y ha involucrado a padres, profesores y funcionarios electos en cáusticos enfrentamientos sobre la salud pública y la elección individual.

Las mascarillas protegen tanto al portador de la infección como a los que están cerca de ella. Pero destacados médicos, en una oleada de ensayos de opinión y apariciones en las noticias, han empezado a cuestionar la validez de exigir a los estudiantes que lleven máscaras mientras los casos de virus disminuyen rápidamente en todo el país.