Rusia intensificó sus ataques contra la ciudad de Mariupol, un día después de que las fuerzas rusas bombardearan un hospital de maternidad en la zona. Según las autoridades ucranianas, en el bombardeo murieron tres personas y 17 resultaron heridas.
Durante una visita a Polonia, la vicepresidenta Kamala Harris pidió una investigación internacional sobre los crímenes de guerra cometidos por Rusia y expresó su indignación por “atrocidades” como el bombardeo del miércoles.