Los empleados de Disney están organizando paros por la respuesta de la empresa al llamado proyecto de ley “Don’t Say Gay” de Florida. Los organizadores de las protestas han animado a los empleados a salir durante sus descansos en sesiones diarias de 15 minutos. También tienen previsto organizar un paro de todo el día el próximo martes, pero por el momento no está claro cuántos empleados participarán.

El controvertido proyecto de ley prohíbe a los educadores hablar de orientación sexual e identidad de género con los niños desde el jardín de infancia hasta el tercer grado.

Los organizadores del paro han redactado una carta abierta en la que afirman que los dirigentes de Disney “no entienden realmente el impacto que esta legislación está teniendo no sólo en los miembros del reparto en el estado de Florida, sino en todos los miembros de la comunidad LGBTQIA+ en la empresa y más”.

El director general de Disney, que emplea a 75,000 personas en sus complejos turísticos de Florida, ha emitido una disculpa por su silencio sobre el proyecto de ley.