Cuando el gobierno ucraniano necesitó vehículos grandes para trasladar a la gente fuera de las zonas de guerra, General Motors donó 50 todoterrenos Chevrolet Tahoe al Ministerio de Infraestructuras de Ucrania.
La naviera Maersk transportó los SUV, y las autoridades polacas los trasladaron al otro lado de la frontera.
GM también ha aportado 250,000 dólares para apoyar la ayuda humanitaria y ha igualado las contribuciones de los empleados estadounidenses hasta por 50,000 dólares para determinadas organizaciones sin ánimo de lucro.
GM Canadá también ha puesto en marcha un programa de igualación de las donaciones de los empleados.
En Rusia, GM suspendió las importaciones de vehículos y la actividad comercial el 28 de febrero y ahora está cerrando su oficina comercial allí.