Uber y Lyft están impulsando una medida que impediría a sus conductores el estatus de trabajadores de pleno derecho, pero un tribunal podría desestimarla.

Menos de dos años después de una feroz lucha en California, las empresas de trabajo autónomo como Uber y Lyft vuelven a chocar con grupos sindicales, políticos y tribunales por una medida electoral en Massachusetts que preservaría el estatus de independencia de los conductores de las empresas.

La propuesta de Massachusetts garantizaría a los trabajadores un salario mínimo, pero limitaría su acceso a otros beneficios ofrecidos a los empleados regulares, de forma similar a la medida electoral en California. Y al igual que en California, los jueces estatales podrían frustrar la multimillonaria campaña que están llevando a cabo las empresas.