Los retos en materia de inmigración a los que se enfrenta el gobierno de Biden en la frontera sur están “más allá de lo que nadie ha visto antes”, declaró el Secretario de Estado estadounidense Antony Blinken.
Funcionarios estadounidenses han dicho que la inmigración será uno de los temas principales de la cumbre de líderes regionales que se celebrará esta semana en Los Ángeles.
Sin embargo, los líderes de varios países que son cruciales para hacer frente a la afluencia de migrantes en la frontera -incluidos México, El Salvador, Honduras y Guatemala- están boicoteando la cumbre, lo que supone un golpe embarazoso para la Casa Blanca en un momento en el que está luchando por resolver el problema.
En la frontera sur de Estados Unidos, el Servicio de Aduanas y Protección de Fronteras detuvo a más de 310,000 inmigrantes procedentes del Triángulo Norte de Guatemala, Honduras y El Salvador entre octubre y abril, según los últimos datos de la agencia.