El precio medio de la gasolina en EE.UU. superó ayer por primera vez los 5 dólares por galón, según GasBuddy, y muchos expertos predicen que nos dirigimos hacia los 6 dólares y más.

Una “tormenta perfecta” de variables se ha alineado para impulsar los precios de la gasolina este verano, lo que lleva a un grave desequilibrio entre la oferta y la demanda.

Por el lado de la demanda, los estadounidenses están aumentando los viajes durante el primer “verano reabierto” desde que comenzó la pandemia.

Pero no hay suficiente oferta para satisfacer la demanda. La guerra en Ucrania ha sacado del mercado gran cantidad de petróleo ruso, mientras que las refinerías estadounidenses están básicamente al límite de su capacidad.

Los economistas estarán pendientes de si los estadounidenses empiezan a conducir menos porque es demasiado caro. A corto plazo, un aumento del 10% en el precio de la gasolina suele provocar un descenso del 2% al 3% en el consumo.