Vicky Umodu se sorprendió al descubrir más de 36,000 dólares en un sofá que le habían regalado, pero inmediatamente devolvió el dinero a la familia que le regaló el mueble.
Umodu estaba buscando muebles para su casa cuando vio el anuncio en Internet. Temiendo que fuera un truco, llamó a la familia y se enteró de que había fallecido un ser querido y que estaban regalando sus posesiones.
Al observar detenidamente su nuevo sofá, se dio cuenta de que parecía haber algo en uno de los cojines. Cuando abrió la cremallera y miró dentro, encontró varios sobres llenos de dinero.
Como agradecimiento, la familia pagó un nuevo frigorífico para Umodu y le regaló 2,200 dólares.