Los mayores bancos de Estados Unidos están bien capitalizados y podrían resistir una grave recesión económica, según anunciaron funcionarios de la Reserva Federal tras una revisión anual de la capacidad de resistencia de los grandes bancos.
La Reserva Federal puso a prueba a los 34 mayores bancos que operan en Estados Unidos, analizando cómo sus balances soportarían las fuertes caídas de los precios de los activos y un total de 612,000 millones de dólares en pérdidas, causadas principalmente por la tensión en los valores de los inmuebles comerciales y en los mercados de deuda corporativa.
Cada banco tenía suficiente capital para cumplir los requisitos mínimos de los reguladores, incluso en el peor de los casos.