Dicen por ahí que nadie nace sabiendo ser padre, todo en esta vida requiere aprendizaje para perfeccionarse aunque también sabemos que no existen los padres perfectos, así como no existen los hijos perfectos; lo que es un hecho es que a la hora de criar a un niño hay muchas visiones sobre lo que es correcto o incorrecto, desde el cuidado intenso hasta el desapego, cada familia tiene un método y suele ser siempre sensible de fallar, pero Pepe Aguilar parece querer demostrar que tiene la receta para ser el ¡Mejor Papá del Mundo!
Apenas les dábamos a conocer que el ídolo ranchero fue criticado pues censura a Ángela respecto a los temas que tiene “permiso” de cantar o no, pero esta vez el mensaje fue para los padres a los que de paso llamó: “tarugo”, y pidió no mentir a los chicos, ¿un poco extraño no?
Cada quien tiene una misión en la vida, eso es totalmente cierto, cada uno busca su sitio, su sentido, pero lo que argumenta el heredero de la Dinastía Aguilar es lo siguiente: “No le digan a los niños y niñas que a esta vida se viene a ser feliz, por el amor de Dios qué es eso, a esta vida no se viene a ser feliz, esa es una de las mil cosas que haces en la vida”.
Y prosiguió: “Si vienes solamente a buscar una cosa, pues estás fregado, ya te perdiste todas las demás, por lo tanto cuando le dices a un chavito eso le estás mintiendo y creando falsa expectativas porque también tendrá que estar triste, desilusionarse y aprender y conocer”. Esto dentro de su tan gustada sección que suele nutrir con este tipo de pensamientos bajo el slogan “La Amargura de Pepe”. Y aunque muchos pueden estar de acuerdo, otros considerarán que la idea de la felicidad no es un único fin sino el fin común, y así podríamos estar debatiendo interminablemente.
Evidentemente, Pepe se siente orgulloso de sus hijos, tanto Aneliz como Ángela y Leonardo han sido “ejemplares” ante sus ojos, y aún en el caso de su hijo mayor Emiliano que le ha dado muchos dolores de cabeza pues incluso ha pasado por la cárcel, se ha tatuado el rostro y ha sido vinculado con algunos personajes cercanos a los “malandros”, él estuvo siempre ahí al pie del cañón y eso sí que nadie se lo puede negar.
Finalmente, compartió un tour gastronómico en la hermosa Mérida en Yucatán, uniéndose a la labor de Alejandro Fernández que hizo lo propio al presumir en sus redes la bella ciudad del sureste mexicano.
