Dicen por ahí que el que “es perico donde quiera es verde”, y este dicho tan popular va dedicado hoy a otro artista tremendamente popular pues su regreso al mundo de la música de manera total ha demostrado que entre sus fans, el tiempo no ha pasado, y su voz y presencia sigue siendo ovacionados incluso en los lugares más inesperados, ante públicos muy diversos y que no saben de diferencias generacionales.
“El Rey de la Taquilla”… ¡Está de vuelta! y no sólo con sus 4M de oyentes en Spotify que lo extrañaban, sino también en vivo y a todo color.
Acostumbrados a ver al chiapaneco en grandes recintos, pues vaya buena suerte que tuvieron los tapatíos al llevarse un 2×1 que desquitó y de más el boleto, los verdaderos conocedores de música norteña, texana, se dieron cita para disfrutar del increíble repertorio de éxitos de Intocable, pero nunca imaginaron que se llevarían la sorpresa de escuchar un “orgánico” dueto precisamente con Álvarez. Julión quiso disfrutar del espectáculo y Ricky no dudó en invitarlo a subir para entonar “Un Desengaño” de los himnos más adoloridos y favoritos de la raza.
Pero no solo los sitios más emblemáticos de cada ciudad son dignos de la visita del también empresario, pues una historia de “cuento de hadas” se vivió con él como príncipe protagonista sacando alaridos y ovaciones de un grupo de chiquillas que junto con la quinceañera vivieron una gran noche pues el chambelán fue de primer nivel.
Ni siquiera la festejada estaba segura de que el cantante de “Pa que se me quite lo cab..” llegaría, pero su sueño fue cumplido, y aunque no es muy bueno para el vals, himnos como “Terrenal” y “El Amor de su Vida” fueron parte del repertorio de baile con la jovencita.
Finalmente, donde sí era esperado y de más, fue en el Palenque de La Comarca Lagunera, donde ofreció su show, y salió apapachado con muchas rosas y se echó muy buenos pasos.