El ex primer ministro japonés Shinzo Abe murió tras recibir un disparo en un discurso de campaña el viernes.
Al parecer, el sospechoso utilizó un arma de fabricación casera para saltarse las leyes japonesas sobre armas, que son de las más estrictas del mundo.
El autor de los disparos, de 41 años, afirmó que no estaba motivado por la política.