Los pedidos online, que se dispararon con el inicio de la pandemia, siguen atascando las calles de la ciudad.
Amazon, Hello Fresh, Stitch Fix. Se pulsa un botón y se recibe en tres o cinco días, o incluso en uno. Paquetes, paquetes y más paquetes: productos de todo el mundo que se entregan con un par de clics. Pero este colmo de la comodidad para el consumidor lleva años complicando la vida urbana, dando lugar a un aumento de los robos y del tráfico, de los residuos de paquetes y de un panorama de negocios locales en dificultades. Algunas ciudades, especialmente en Europa y Japón, están aplicando normativas que reducen drásticamente el estrés relacionado con los paquetes. Pero la ciudad de Nueva York todavía no.
En total, con los comestibles y la comida preparada, el total de entregas diarias se acumula en más de 3.7 millones. Eso es casi suficiente para entregar cada día un artículo a la mitad de los habitantes de Nueva York.