Varios días de clima inusualmente cálido en el norte de Groenlandia han desencadenado un rápido derretimiento, visible por los ríos de agua derretida que se precipitan al océano.
Las temperaturas han rondado los 60 grados Fahrenheit, 10 grados más cálidos de lo normal para esta época del año.
La cantidad de hielo que se derritió en Groenlandia sólo entre el 15 y el 17 de julio -6,000 millones de toneladas de agua al día- sería suficiente para llenar 7.2 millones de piscinas olímpicas, según datos del Centro Nacional de Datos de Nieve y Hielo de Estados Unidos.