No es ningún secreto que, tras el fin de una relación, sobre todo si ha durado años, es muy difícil superar el sentimiento de dolor por la pérdida del ser querido.
Es habitual que las personas se tomen un tiempo para reflexionar y sanar. Sin embargo, los expertos afirman que el sexo casual y las citas con otras personas mientras se está luchando pueden aumentar la autoestima y, de paso, divertirse.
La aplicación de citas Ashley Madison reveló los grandes beneficios de las aventuras, especialmente cuando se tiene el corazón roto. Según los usuarios, el 84% cree que el sexo casual es una forma de autocuidado y amor propio esencial para una salud mental sana.
Según la psicóloga y sexóloga Lara Castro, coordinadora del Grupo de Trabajo de Sexualidad y Pareja del Colegio de Psicología de Cataluña y directora de Placer ConSentido, las citas, los encuentros y el sexo tienen una gran importancia para la seguridad y la confianza de las personas.
Un estudio realizado por la psicóloga Lynne Cooper, de la Universidad de Missouri (Estados Unidos), descubrió que el sexo casual sin compromisos emocionales puede tener una función terapéutica en la gestión del estrés.
Según la psicóloga clínica de la Pontificia Universidad Javeriana, Tatiana Colón, el “corazón roto” es un fenómeno psicológico que afecta a la salud mental: ”
Christoph Kraemer, CEO para América Latina de la citada app de citas, explica que “las experiencias de nuestros miembros al salir y conocer a varias personas tienen efectos positivos, como una mayor confianza en sí mismos, una mejor vida sexual y un mejor estado de ánimo. Los socios también dicen que con los segundos socios han satisfecho necesidades que antes no estaban cubiertas.”
Aunque muchas personas se sienten agobiadas o culpables por mantener relaciones sexuales ocasionales tras una ruptura, lo cierto es que cada persona experimenta el duelo de forma diferente. “Algunos se encierran en casa y no quieren conocer a nadie ni nada, mientras que otros, aunque tengan el corazón roto, prefieren salir con los amigos e incluso conocer gente nueva. Ambas tácticas son igual de legítimas, sólo hay que evitar dañarse a uno mismo o a los demás”, dice Silvia Pastells, psicóloga clínica, sexóloga y terapeuta de pareja del Institut Clinic de Sexologia de Barcelona.