La sequía en el norte de México hace que los grifos estén secos en la ciudad de Monterrey, por lo que las pipas, gestionadas principalmente por la autoridad municipal, son la única forma de suministrar agua a los hogares y las empresas.
Mientras la gente que no puede permitirse agua embotellada bebe el agua salubre de los camiones, crece el enfado por el hecho de que las empresas de bebidas con plantas embotelladoras como Coca Cola y Heineken, estén extrayendo miles de millones de litros de agua de los depósitos públicos.