Esto ya ni siquiera entra como “una raya más al tigre”, no importa cuántas veces toque fondo, se diga arrepentido, asegure haber cambiado, su mal temperamento siempre se impone.

El rey del escándalo del regional mexicano, Pablo Montero una vez más está en el “ojo del huracán”, pues es incapaz de controlar su carácter y siempre está rodeado de “temas incómodos” que cuando la prensa lo cuestiona… ¡enloquece!

Esta vez fue una mujer, reportera de un famoso tabloide de espectáculos en México. Pablo Montero se encontraba dando entrevistas antes de comenzar su show en Saltillo, Coahuila, cuando reaccionó de manera agresiva ante los cuestionamientos de la prensa. Recordemos que hace tiempo se dijo que había agredido a un fotógrafo en el pueblo mágico de San Miguel de Allende, supuestamente por haber captado a la chica que lo acompañaba sin permiso.

Y esta vez no solo la reportera sino que su equipo, también sufrió las consecuencias tras los golpes e incluso continuando la agresión al evitar que pudiera salir del lugar sintiéndose totalmente aterrada y vulnerable. “¿Qué le quieres decir a las personas que quieren que ingreses a un centro de rehabilitación?”… de ahí todo se desató, primero con una respuesta molesta pero solo verbal: “¡No entiendo tu pregunta, no hagas preguntas que no vienen al caso, se más profesional!”, pero después vino el empujón y los gritos de: “¡vas a borrar el video!”…su equipo quiso confiscar su material, le trataron de quitar el celular, el equipo cayó al suelo y luego las amenazas de llamar a la patrulla para que ella y el camarógrafo fueran sacados del recinto.

Tras las declaraciones de Juan Osorio respecto a su preocupación por un problema de alcoholismo de años de quien fuera su protagonista en la bioserie de Vicente Fernández, era de esperarse que los medios quisieran saber más sobre este respecto, pero al tocar el tema de su adicción, se perdieron los estribos.

El show además es una gira llamada “Homenaje al Último Rey” por lo que sigue también quedando mal con los herederos del “Charro de Huentitán” pues el “homenaje” sigue siendo foco solo de malas notas.

Claro está, él lo negó: “Yo estaba muy amable, atendiendo a las personas, ya se había acabado la rueda de prensa, ella llega hace una pregunta personal, insistió y tuve que poner un límite para que respeten mi vida privada, si no me respetan las cosas cambian”.