Con tantos virus de los que preocuparse, ¿cómo podemos hacer un seguimiento de todos ellos?
Una vía: El retrete. Un equipo de científicos, expertos en salud pública y fontaneros de Nueva York está adoptando la vigilancia de las aguas residuales como el futuro del seguimiento de las enfermedades.
Las personas infectadas por el coronavirus y otras enfermedades eliminan el patógeno en sus heces. Midiendo y secuenciando el material vírico presente en las aguas residuales, los científicos pueden determinar si los casos están aumentando en una zona concreta y qué variantes están circulando.