En 2015, el 59% de los jóvenes de 14 años tenía un smartphone. En 2021, esa cifra se había disparado al 91%.
Un informe del Pew Research Center muestra que los adolescentes viven básicamente en línea, ya que el 46% de los jóvenes de 13 a 17 años utilizan Internet “casi constantemente.”
Y todo ese tiempo de pantalla no parece ser bueno para la salud mental.
Un estudio de los CDC descubrió que el porcentaje de estudiantes de secundaria estadounidenses que tienen “sentimientos persistentes de tristeza o desesperanza” aumentó del 26% al 44% entre 2009 y 2021.
El estudio también encontró que el porcentaje de adolescentes estadounidenses que duermen ocho o más horas por noche cayó un 30% entre 2007 y 2019.
La respuesta no es clara. Pero dormir más y pasar menos tiempo frente a la pantalla probablemente no sea un mal punto de partida.