Las empresas estadounidenses están a punto de devolver a Estados Unidos 350,000 puestos de trabajo del extranjero este año, según la Reshoring Initiative.
Esta cifra es la más alta desde que el grupo de presión del sector manufacturero comenzó a hacer un seguimiento de los datos en 2010, cuando sólo se devolvieron 6,000 puestos de trabajo.
Algunas de las razones de este auge son los estragos en la cadena de suministro causados por Covid y la guerra de Ucrania, así como los nuevos incentivos gubernamentales para la producción nacional.