Los votantes hispanos se han movido hacia la derecha en los últimos años. Como grupo, siguen prefiriendo a los demócratas, pero el margen se ha reducido significativamente. En 2020, Joe Biden ganó el grupo por sólo 26 puntos porcentuales.

Durante gran parte de las últimas décadas, los votantes hispanos apoyaron al Partido Demócrata con tanta fuerza que mucha gente llegó a pensar en ellos como un electorado demócrata seguro, junto con los votantes negros, los votantes judíos y los graduados universitarios seculares.

En cambio, los votantes hispanos parecen situarse en algún lugar entre estos grupos confiablemente progresistas y los blancos de clase trabajadora, y se han convertido en un grupo decisivo en la política estadounidense.