Además de unas vistas impresionantes, la pequeña isla mediterránea de Malta ofrece una oportunidad única a los más adinerados: la ciudadanía por inversión.
A cambio de una cuota considerable, la gente puede hacerse ciudadana del país y obtener un pasaporte maltés, uno de los varios “pasaportes dorados” que permiten viajar sin visado por toda Europa.
La Unión Europea no es partidaria, y recientemente ha llevado a Malta a los tribunales por este controvertido programa.
El pasaporte dorado cuesta a partir de 677.8 mil dólares, sin incluir la comprobación de antecedentes y las tasas legales. Desde 2013, Malta ha recaudado mes de 1,000 millones de dólares gracias a este programa.
Aunque es fácil imaginar a los delincuentes internacionales acudiendo en masa al programa, la mayoría de los solicitantes solo buscan una forma más fácil de viajar, según la doctora Kristin Surak, profesora de la London School of Economics.