Las camas para adultos son más lucrativas que las de los niños. Por eso, cuando las instituciones tratan de aumentar sus márgenes de beneficios, la pediatría suele ser uno de los primeros servicios que se recortan.
Los hospitales de todo el país, están cerrando unidades pediátricas. La razón es la economía: las instituciones ganan más dinero con los pacientes adultos.
Muchos hospitales han convertido las camas de los niños en camas de UCI de adultos durante la pandemia y son reacios a volver a cambiarlas. Ahora, la escasez de personal, la inflación, los bajos reembolsos de Medicaid y la disminución de las subvenciones federales concedidas durante la pandemia han dejado a algunos centros de salud operando con márgenes negativos y deseosos de dar prioridad a los pacientes más rentables.