Los peregrinos habrían llegado a Plymouth Rock, el 11 de diciembre de 1620. El primer invierno fue muy duro para estos, y no fue hasta el siguiente otoño que tuvieron una buena cosecha de las semillas que habían plantado. Esto decidieron celebrarlo con una gran cena, incluyendo a los indios que los habían ayudado a sobrevivir su primer año.
Este día, los hombres se fueron a cazar y a conseguir carne para comer en el día. No se sabe si este día comieron pavo, pues en esta época se llamaba así a cualquier clase de ave silvestre.
A diferencia de la cena tradicional de hoy en día, en esa época no había harina para cocinar pastel de calabaza, ni arándanos, leche y mantequilla.
En la primera celebración, la cena incluyó pescados, bayas silvestres, langostas, frutas secas, maíz, venado y ciruelas.
El día de Thanksgiving no se celebraba todos los años. Incluso, no fue hasta junio de 1676 que este se celebró por segunda vez. Fue hasta 1863, que el presidente Lincoln proclamo el día de Thanksgiving oficialmente, como un día festivo y que se celebraría el cuarto jueves de cada noviembre.