El veredicto es claro: La semana laboral de cuatro días es buena para las empresas.

Después de seis meses, es poco probable que la mayoría de las 33 empresas y 903 trabajadores que están probando el horario, sin reducción salarial, vuelvan a la semana laboral estándar, según los organizadores del programa piloto mundial.

La mayoría de las empresas que participaron en la prueba tenían su sede en Estados Unidos e Irlanda. Los que respondieron a la encuesta calificaron su experiencia general con un 9 sobre 10, basándose en la productividad y el rendimiento.

Los trabajadores se mostraron igualmente positivos sobre el ensayo, informando de menores niveles de estrés, fatiga, insomnio y agotamiento, y de mejoras en la salud física y mental.