En octubre, Elon Musk dijo a los inversores que Tesla se preparaba para “un final de año épico”.
Sin embargo, la capitalización bursátil de la compañía cayó por debajo de los 500,000 millones de dólares por primera vez desde 2020.
Junto con el aumento de las tasas de interés y los temores recesivos, los factores que podrían estar afectando en la tendencia a la baja incluyen:
Los desafíos de la demanda en China, donde Tesla ha recortado los precios y ha reducido las previsiones de producción.
La relación de Musk con Twitter, que ha asustado a los inversores desde el punto de vista de la reputación y la logística.