A partir de esta semana, los adultos del estado pueden consumir legalmente psilocibina, un psicodélico natural que ha demostrado ser muy prometedor para el tratamiento de la depresión grave, el trastorno de estrés postraumático y la ansiedad al final de la vida, entre otras afecciones.
Dos requisitos clave son que un facilitador certificado por el estado debe estar presente durante los viajes inducidos por la droga, que pueden durar cinco o seis horas, y el consumo debe tener lugar en un centro de servicio autorizado.
Para los partidarios de la reforma antidroga, el planteamiento de Oregón es un cambio político radical que esperan sirva de inspiración a otros estados y municipios para suavizar prohibiciones que llevan mucho tiempo vigentes.