Los compradores de coches no habían visto subidas de precios como estas desde los años setenta y ochenta. Lo que hace que la década de 2020 sea única es lo mucho que subieron los precios de los coches en un corto periodo de tiempo. En los 12 últimos meses del mercado de coches usados, el índice subió un 45%. Nunca ha habido un periodo de 12 meses desde que el BLS empezó a llevar registros en 1947 en el que los precios de los coches usados se hayan inflado tanto.

Los gustos de los consumidores han cambiado hacia camionetas y todoterrenos más grandes y caros. Los compradores de coches nuevos están pagando por todas las adiciones disponibles, en comparación con los modelos más sencillos disponibles hace unos años.

Ambas tendencias hacen subir los precios e incentivan a los fabricantes a fabricar vehículos más caros.