Tom Hanks ha hablado en contra de la tendencia actual de las editoriales de reescribir libros clásicos para adaptarse a las “sensibilidades modernas”.
Estos comentarios de Hanks fueron motivados por la última reescritura de libros del fallecido Roald Dahl por parte de la editorial Puffin. Estos libros habían eliminado palabras como “gordo” y “feo”, así como cambios en secciones sobre raza, salud mental y género.
Hanks afirma: “Todos somos adultos aquí y entendemos el momento y el lugar en que se escribieron estas cosas”.