Target no está precisamente en apuros: su cliente medio hace unos 23 viajes al año, gastando unos 50 dólares cada vez y sus ventas alcanzaron los 107,000 millones de dólares el año pasado.

Sin embargo, el pasado año fiscal, el minorista registró 763 millones de dólares en “pérdida desconocida”: pérdida de inventario, ya sea por accidente o por un acto deliberado como hurto, fraude o robo de carga.

No es sólo Target: Walmart, Walgreens y Home Depot también han lamentado recientemente el aumento de los robos.

“No se trata de hurtos de artículos individuales para uso personal”, declaró el presidente de la Federación Nacional de Minoristas, Matt Shay. Según él, las tiendas están luchando contra redes “sofisticadas” que roban en toda la cadena de suministro: muelles, camiones y ferrocarriles, además de las tiendas.

Los minoristas no tienen equipos que luchen contra la delincuencia organizada.

Tal vez sea porque los robos externos sólo representaron el 37% de las pérdidas de inventario el año pasado; los robos por parte de empleados (28.5%) y los fallos en los procesos (25.7%) fueron otros de los principales culpables.