Desde el primer día en que una mujer se convierte en madre, empieza a ser bombardeada con ciertas frases que, si bien son bienintencionadas, a veces son francamente exasperantes. A continuación se presentan algunas de las frases más odiadas por las madres, y por qué.
“¿No te cansas de estar en casa todo el día?”
Aunque ser madre es en gran parte un trabajo a tiempo completo, la verdad es que las madres no pasan todo el día en casa. De hecho, la mayoría de las madres trabajan fuera del hogar, y aquellas que no lo hacen probablemente tengan un sinfín de actividades e responsabilidades que les ocupan el tiempo. No es que las madres no disfruten el tiempo que pasan con sus hijos, pero es importante recordar que también necesitan un descanso de vez en cuando.
“¿Por qué no te tomas un día libre?”
Aunque esta frase puede sonar bienintencionada, lo cierto es que muchas madres no se sienten cómodas dejando a sus hijos con otras personas. Además, el simple hecho de tener que pedir un día libre puede ser estresante, ya que muchas madres temen que se les considere poco profesionales o que no se tomen en serio sus responsabilidades.
“Todas las madres pasan por esto”
Esta frase es especialmente frustrante cuando se es madre por primera vez. Aunque es cierto que muchas madres experimentan las mismas dificultades, cada madre es única y enfrenta sus propios desafíos. No se puede esperar que todas las madres se sientan cómodas con el mismo tipo de consejo o se enfrenten a las mismas experiencias.
“No te preocupes, todo estará bien”
Aunque este es un mensaje de aliento, en realidad es poco consolador para las madres que están pasando por un momento difícil. Las madres necesitan ser escuchadas y comprendidas, no tranquilizadas con frases vacías.