Después de su controvertido mandato como presidente de los Estados Unidos, Trump se enfrenta a una serie de desafíos legales y políticos. Su enfoque principal en la próxima elección presidencial es garantizar su propia supervivencia en lugar de centrarse en los problemas y necesidades del país.
Trump se encuentra en medio de investigaciones y juicios que podrían tener graves repercusiones para él. Desde las acusaciones de irregularidades financieras hasta los posibles cargos por incitación a lo sucedido en el Capitolio, su futuro político y personal están en juego.
Si Trump decide postularse nuevamente, es probable que utilice su plataforma para desacreditar a sus oponentes y presentarse como la única opción para “hacer grande a Estados Unidos nuevamente”. Sin embargo, su principal motivación será evitar consecuencias legales y proteger su legado.