El CEO de OceanGate desestimó repetidamente las advertencias sobre la seguridad del submarino Titan, según intercambios de correos electrónicos con un especialista en exploración en aguas profundas.
Rob McCallum sugirió al CEO de OceanGate, Stockton Rush, a dejar de utilizar el submarino hasta que fuera clasificado por un organismo independiente, pero Rush respondió que estaba cansado de las personas de la industria que intentaban detener la innovación con argumentos de seguridad.
McCallum había advertido repetidamente a la compañía sobre la necesidad de obtener certificación para el Titan antes de su uso comercial, pero el vehículo nunca fue certificado ni clasificado.
Expertos han cuestionado la seguridad del Titan y la regulación de las expediciones en aguas profundas del sector privado.
Se han planteado preocupaciones sobre el diseño experimental y el material de fibra de carbono utilizado en el submarino.
McCallum y otros líderes de la industria habían advertido anteriormente a OceanGate sobre posibles problemas catastróficos. La empresa no ha comentado sobre los correos electrónicos.
