Eduardo Verástegui, quien pasó de ser galán de telenovela a uno de los personajes más polémicos de la televisión mexicana por el activismo religioso que profesa, en el que promueve la desinformación y discursos de odio, estuvo el pasado domingo conversando con el periodista Jorge Ramos en su programa de Univisión “Al punto”, sobre la nueva película del tamaulipeco de 49 años, ‘Sound of freedom’, que aborda el tema de la trata de niños. Durante la entrevista, hubo un momento muy particular que rápidamente llamó la atención de los medios y sembró muchas dudas y reacciones.
Durante la entrevista que se realizaba normalmente, en un momento determinado, Verástegui dijo a Jorge Ramos: “Yo sé que tú no crees en Dios, me lo has dicho”, a lo que el comunicador le respondió: “Soy agnóstico, quisiera tener la certeza, pero no la tengo y quisiera tener tu fe, pero no la tengo”.
Fue entonces cuando el actor detuvo la entrevista y sin explicación alguna, cerró los ojos y se puso a rezar por el periodista: “Dios mío, Jesucristo, Dios y hombre verdadero, yo te pido por mi hermano Jorge Ramos y su familia, su equipo de trabajo, bendícelo y protégelo y si estás aquí manifiéstate en él, que es un hombre bueno. Jorge es un hombre bueno, no quiero pensar lo que él haría si tú estuvieras en su corazón y él te deja entrar, por Cristo nuestro Señor. Amén”.
“Te lo agradezco y lo respeto totalmente, pero esa certeza, esa fe no la tengo Eduardo”, le dijo Ramos al terminar la oración.
“Es una gracia, yo soy católico por la gracia de Dios y yo quiero que vivas esa fe Jorge porque te conozco, eres una persona entregada a tu trabajo, te preocupas por los demás, actúas mejor que muchos católicos que se dicen ser católicos y no hacen ni la mitad de lo que tú haces, entonces no quiero imaginarme lo que tú harías de la mano de Dios…”, dijo Verástegui.
Al día siguiente, en el programa Despierta América de Univision, Verástegui también estuvo como invitado hablando de su película, el actor aclaró por qué rezó por Ramos.
Según él, haber dicho ‘ojalá tuviera la fe que tú’ le tocó el corazón y lo que hizo fue pedirle a Dios, porque “él es el que da la fe”, aseguró.
Como todo un maestro de la mercadotecnia, o mejor aún, como la interminable lista de defraudadores y líderes de evangélicos que reúnen carretadas de dólares entre sus seguidores, así Verástegui dio su función, en su intento por reunir más adeptos y, claro, promover su película.