Según el portal especializado en fortunas de celebridades Celebrity Net Worth, Eduardo Yáñez posee una riqueza total de 3 millones de dólares. Además, hacia el 2008, el actor ganaba alrededor de 30 mil dólares mensuales cuando trabajaba en la telenovela “Fuego en la sangre”. Su éxito en el mundo de las telenovelas lo ha convertido en un actor bien remunerado y respetado en la industria.
Hoy, a sus 62 años, Eduardo Yáñez ha logrado acumular una gran fortuna a lo largo de su carrera artística. Ha sido reconocido mundialmente por sus actuaciones en títulos como “El amor nunca muere”, “Corazón salvaje”, “Senda de gloria”, “Yo compro esa mujer” y “Guadalupe”, entre muchos otros proyectos exitosos.
Otro actor mexicano que ha logrado hacerse millonario gracias a su carrera en las telenovelas es Fernando Colunga. Sin embargo, las cifras exactas de su fortuna varían según diferentes fuentes. El diario mexicano EL UNIVERSAL estima que Colunga a sus 57 años tiene alrededor de 2 millones de dólares, mientras que About Español aseguró en 2019 que el actor ganaba 85 mil dólares por mes durante sus proyectos y 30 mil dólares mensuales cuando no estaba trabajando, gracias a que era una de las estrellas que contaba con la famosa exclusividad de Televisa.
Otro exitoso actor que ha alcanzado la categoría de millonario gracias a su trabajo, tanto en telenovelas como en proyectos empresariales, es Gabriel Soto. Aunque más joven que sus colegas, a sus 48, según Celebrity Net Worth, Soto posee una fortuna de 15 millones de dólares. Sin embargo, EL UNIVERSAL estima que su riqueza sería mucho mayor, alrededor de los 185 millones de dólares, teniendo en cuenta tanto sus ganancias como actor como las que obtiene como empresario.
Las cifras de las fortunas de estas figuras pueden variar dependiendo de diferentes factores, incluyendo sus ingresos por proyectos artísticos, acuerdos comerciales y otras inversiones empresariales.
A pesar de las discrepancias en las cifras, señala EL UNIVERSAL, lo que es innegable es que Eduardo Yáñez, Fernando Colunga y Gabriel Soto lograron asentar monetariamente su talento.
